miércoles, 16 de diciembre de 2015

Dejemos a los niños que escojan sus juguetes y no las ideologías

Hace unos días visitaban Granada dos sobrinos de cuatro y nueve años. Iban a  pasar el Puente de la Inmaculada  con sus padres y estos nos los  iban a dejar unas horas  para celebrar su aniversario de bodas. Para ocupar el tiempo de los niños fui a un almacén a comprar unos juegos de mesa adecuados a su edad. Al llegar al establecimiento  un empleado me indicó el pasillo donde encontraría lo que buscaba y cuando ya estaba en él, buscando los juegos, me encontré a un matrimonio joven con su hija que tendría en torno a cuatro años. 

La niña quería una muñeca pero el padre ponía empeño en que su hija comprara un juguete "más masculino". Ella se negaba diciendo que no le gustaba y que "era de niños". El padre le respondía airado que no había juguetes de niños o de niñas. Con aire distraído atendí a la conversación que terminó con el disgusto de la niña por no poder elegir su muñeca porque "papa quería que escogiera juguetes de niños"

El padre tenía toda la apariencia de ser una persona normal, en el que ha calado el "discurso de la Ideología de Género" y "trata de imponerla" en su familia, convencido de que es lo mejor aunque con ello hiciese sufrir a su propia hija.

Hace un tiempo me llamo la atención un vídeo que aparece en Youtube y que se encuentra simplemente poniendo  en el apartado de búsqueda "la Paradoja noruega". En el se desmonta la parte perniciosa de la Ideología de género, la que pretende hacernos a todos iguales por decreto - como todas las ideologías- y la que convierte el sexo en algo que se escoge. Pues bien Noruega es, según la ONU, el país con más igualdad, donde más se invierte en esta ideología, con organismos públicos creados para su instauración, pero dónde las mujeres y los hombres  siguen escogiendo las profesiones de siempre, los niños siguen queriendo los juguetes de siempre, etc. Invito a ver este vídeo, recorte de un programa del Jordi Évole noruego, en el siguiente enlace https://www.youtube.com/watch?v=pLu78uzKyY0 . No tiene desperdicio.



martes, 15 de diciembre de 2015

¿La inteligencia del niño es fija o maleable? Consejos para padres y profesores


En la anterior entrada hacía referencia a 20 principios de la psicología para enseñar y aprender mejor, diseñados por la  Coalition for Psychology in Schools and Education, bajo los auspicios de la APA (American Psychological Association). Por razones de espacio solo enumere los principios. En esta entrada recojo una interpretación personal de las implicaciones para padres, profesores  e hijos del primero de ellos. Me baso en la  explicación  recogida en este enlace  http://goo.gl/ykG53q , pero que sintetizo y comento  con el objetivo de facilitar su lectura, sin dejar de ser consciente de que el resultado final va a tener menos calidad que el original. Añado, en cursiva, algún comentario personal mío Pues bien, una vez hechas las aclaraciones, vamos a la tarea:

PRIMER PRINCIPIO: Las creencias o percepciones que los estudiantes tengan sobre su inteligencia y capacidad afectan a su aprendizaje y funcionamiento cognitivo.

Valoraciones prácticas  para padres y profesores :
  • Los estudiantes persuadidos de que la inteligencia es una capacidad maleable y no fija son más capaces de enfrentarse a tareas difíciles, son menos sensibles a las críticas negativas y se recuperan mejor de sus fracasos. Ocurre lo contrario con los estudiantes convencidos de que la inteligencia es una capacidad fija.
  • Los estudiantes convencidos de que la inteligencia es fija atribuyen sus fracasos a la falta de inteligencia. Los persuadidos de que es maleable, variable,… atribuyen sus fracasos a la falta de esfuerzo. Esto último es controlable, mientras que la falta de capacidad no. Es pues más fácil motivar al que ve su fracaso como algo reversible (falta de esfuerzo).
  • Si los padres o profesores huyen de las etiquetas  negativas y  positivas mal administradas  y convencen a los hijos/alumnos de que los resultados son fruto de la dedicación, el esfuerzo y el uso de las estrategias de aprendizaje adecuadas, partirán de un mejor posición para motivarlos y hacerlos resistentes a la frustración y el fracaso. Atribuir el fracaso a la falta de capacidad lleva al estudiante a tirar la toalla. Ejemplo: los padres no deben juzgar a sus hijos diciéndoles que son “tontos” o “inútiles” –sobre todo en la infancia- ya que están promoviendo que en el futuro  tiren la toalla con facilidad ante tareas o problemas con cierta dificultad.
  • Alabar al alumno cuando resuelve con rapidez  una tarea sencilla es llevarlo a pensar que la inteligencia depende de la velocidad y de la no necesidad de esfuerzo. Esta asociación es problemática cuando el alumno tiene que resolver tareas más difíciles que requieren más esfuerzo y tiempo.
  • Los profesores deben dirigir los elogios al esfuerzo del alumno y al uso de las estrategias de aprendizaje adecuadas, no a su capacidad. Ejemplo: si elogiamos a un alumno cuando resuelve una tarea sencilla esto puede asociar el elogio a su falta de capacidad, al creer que lo usa para animarlo por su falta de capacidad.
  • Un alumno puede rehuir una tarea compleja para evitar que juzguen su capacidad. Puede pensar de la siguiente forma:  “si no la hago no me equivoco y así nadie me juzga”.  De nuevo, el profesor ha de juzgar el rendimiento y evitar juzgar la capacidad.
  • Cuando un alumno recibe ayuda no solicitada  de su profesor o afecto ante un fallo y otro alumno o la mayoría de los alumnos no la reciben, puede interpretar que tiene baja capacidad.
  • No me ha dado mal resultado usar el elogio en público, en la línea de lo expuesto hasta ahora y la corrección en privado evitando humillar, usando propuestas y consejos constructivos, sin evitar la verdad.
  • Todo lo anterior confirma el principio de que cada alumno necesita una atención individualizada, en función de sus características y contexto, es correcto.
Termino, como siempre, con una frase. En este caso de Howard Gardner, psicólogo, investigador y profesor de la Universidad de Harvard:

"La inteligencia no se puede medir con un coeficiente"

José Antonio de la Hoz

Fuentes: blog de Javier Touron y página de la Asociación Americana de Psicología.





jueves, 3 de diciembre de 2015

Como enseñar y aprender según la Asociación Americana de Psicología

A través un artículo  del catedrático Javier Tourón llego a la página de la AMERICAN PSYCHOLOGICAL ASSOCIATION - a la que podéis acceder pinchando aquí http://goo.gl/ykG53q -, repleta de interesantísimos estudios y artículos. Me fijo en uno especialmente útil para padres, profesores y educadores en general, que recoge 20 PRINCIPIOS FUNDAMENTALES DE LA PSICOLOGÍA PARA LA ENSEÑANZA Y EL APRENDIZAJE,  DESDE LA EDUCACIÓN INFANTIL HASTA LA ENSEÑANZA SECUNDARIA.

Creo que contribuimos notablemente a mejorar la sociedad y el futuro de las personas si sabemos cómo enseñar y conocemos mejor cómo se produce el aprendizaje. Por eso, sin más, paso a recoger estos 20 principios. La explicación de cada uno de ellos aparece en el enlace que os he indicado al principio. Son cortas y ayudan a comprender algunos términos técnicos de difícil comprensión para los que no sean profesionales de la enseñanza o la psicología.

PRINCIPIOS:
  1. Las creencias o percepciones que los estudiantes tengan sobre su inteligencia y capacidad afectan a su aprendizaje y funcionamiento cognitivo.
  2.  Lo que los alumnos ya saben afecta a su aprendizaje.
  3. El desarrollo cognitivo de los estudiantes  y su aprendizaje no está limitado por los estadios generales del desarrollo.
  4. El aprendizaje está basado en el contexto, por lo que la generalización del mismo a nuevos contextos  no se realiza de manera espontánea, sino que debe facilitarse.
  5. La adquisición de conocimientos y habilidades a largo plazo depende en gran medida de la práctica.
  6. Un feedback a los estudiantes claro, explicativo y a tiempo, es importante para el aprendizaje.
  7. La autorregulación de los estudiantes ayuda al aprendizaje, y las habilidades de autorregulación se pueden enseñar.
  8. La creatividad del estudiante puede fomentarse.
  9. Los estudiantes tienden a disfrutar del aprendizaje y tienen mejores resultados cuando su motivación es más intrínseca que extrínseca.
  10. Los estudiantes persisten en las tareas que plantean desafíos y procesan la información con mayor profundidad cuando adoptan metas de dominio.
  11. Las expectativas de los profesores sobre sus estudiantes afectan a las oportunidades de estos para aprender, a su motivación y a los resultados de su aprendizaje.
  12. Los objetivos a corto plazo (proximales), específicos y que planteen desafíos moderados, motivan más que los objetivos a largo plazo (distales), generales y que planteen desafíos muy exigentes.
  13. El aprendizaje se encuentra situado dentro de múltiples contextos sociales.
  14. Las relaciones interpersonales y la comunicación son fundamentales tanto para el proceso de enseñanza- aprendizaje como para el desarrollo social y emocional de los estudiantes.
  15. El bienestar emocional influye en el rendimiento educativo, el aprendizaje y el desarrollo.
  16. Los estudiantes pueden aprender cuáles son las expectativas de interacción social y de conducta  en el aula  a través de una formación eficaz y principios conductuales demostrados.
  17. La gestión eficaz del aula se basa en: a) Fijar y transmitir grandes expectativas, b) fomentar de manera consistente relaciones positivas y c) proporcionar un alto nivel de apoyo a los estudiantes.
  18. Tanto la evaluación formativa como la sumativa son importantes y útiles, pero hay que aplicarlas e interpretarlas de distinto modo.
  19. La mejor manera de evaluar las habilidades, conocimientos y capacidades de los estudiantes es mediante procedimientos fundamentados en la psicología y estándares bien definidos de calidad e imparcialidad.
  20. Para valorar correctamente los datos de evaluación es necesario interpretarlos de manera clara, adecuada e imparcial.
Termino, como siempre, con una frase. En esta ocasión de Horace Mann, considerado como el padre de las Escuelas Públicas de los EEUU:

"El maestro que intenta enseñar sin inspirar en el alumno el deseo de aprender está tratando de forjar un hierro frío"